Bendita sea tu mano
Quiero llevarme el sabor de tu cuerpo en mis labios
Llevarlo encendido en mí
Ese recuerdo florecerá cada día
En la evocación del instante en que fuimos uno
y tu cuerpo pasó por cada uno de mis sentidos
dejando la marca del amor no correspondido.
Llevo en mis dedos el mapa de tu piel
y tu aroma está aferrado a mí como yo a tu recuerdo
Porque ante mí apareces y te desvaneces
te cubres de suspiros,
y en el roce delicado de mis dedos
en tu piel
busco cualquier pretexto para ser alfarero
y moldear la delicada curva de tu cadera
Trazar caminos confusos en tu espalda y tus costillas
y hacer mío ese aroma que me enloquece,
el aroma que desprende tu piel al quedar ante mi mano
creadora
Eres mi gran debilidad
Lo sabes y lo aprovechas
Y yo, indefensa criatura, me rindo.
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